El cajon de los juguetes

A ver, sé que llevo un poco de atraso en esto del blog… os prometí contaros todo acerca de mis vacaciones navideñas en Cayo Costa y todavía no os he contado ni una palabra (aparte de lo de Julie Andrews/Esperanza Aguirre). Lo que siento es no poder poner fotos, porque aún he de llevar el carrete a revelar, pero lo mismo esta tarde me animo, las escaneo (mi ActionMan ha comprado en las rebajas post-Navidad uno de esos engendros que copian, escanean, imprimen, faxean...) y os las enseño (aunque creo que no tomé muchas, aparte de que como la cámara buena se me jodido, las he hecho con la compacta... que no es lo mismo).

Ya desde el comienzo del viaje a mí se me cayó la mandíbula pabajo y no se me volvió a poner en su sitio hasta la vuelta... Tuvimos que cruzar la península de este a oeste, y en lugar de hacerlo por Alligator Alley, una carretera muy moderna y muy recta, de pago, lo hicimos por la 41, que es más o menos lo mismo de recta, pero corre paralela al Tamiami Canal y al Everglades National Park y, a partir de mitad de camino, entre Everglades y Big Cypress National Park... yo iba como tonto mirando a los egrets (garzas) de todo tipo que hacían posturitas a mi derecha... cómo me hubiera gustado hacer el camino a pié y con mi cámara lista para sacar las fotos más bonitas del mundo. Cuando de repente me doy cuenta de que en las orillas del canal hay mogollón de alligators (lo traduciría como caimanes... pero es me parece que son especies distintas) y algunos de ellos inmensos como no os haceis una idea... por lo menos vi 50 ó 60.. o más.

Una vez cerca de Naples tomamos la carretera hacia Fort Myers (una de las ciudades más feas del país, estoy seguro) pero no duramos mucho conduciendo porque vimos un WAFFLE HOUSE y. claro, tuvimos que parar para comer. Para los que no conozcan los USA y el sur de los USA, WAFFLE HOUSE es una cadena sureña de restaurantes que se encuentran principalmente en las carreteras (sobre todo a la salida de las autopistas y en las salidas importantes de las ciudades) y para mí son la quintaesencia del país... las camareras son por lo general blancas bastante clase media-baja, muy ordinariotas, pero muy graciosas... se ve que son mujeres de carácter. Hay muy pocas camareras negras o hispanas. Y generalmente hay un cocinero macho (de género, lo que haga en la cama no importa, aunque se les imagina muy heteros) que suele ser grandón, del tipo que impone respeto. Como el restauante está abierto 24 horas al día, es normal que sea así... Otra cosa en WAFFLE HOUSE es que puedes tomar desayunos a cualquier hora, lo cual está de miedo, porque los hacen la mar de nutritivos... y, desde luego, lo que no hay que perderse son los waffles, como gofres redondos y grandotes... nuestros favoritos son los que tienen trozos de nuez de pecán entre medias. Os pongo el link a la página web de WAFFLE HOUSE. No os perdais la sección de JUKEBOX... en cada restaurante hay una jukebox y una parte de las canciones están compuestas exclusivamente para WAFFLE HOUSE... cosas como “Gracias WAFFLE HOUSE” , “¡¡Hay nueces en mi WAFFLE!!”, “Es tiempo de volver a WAFFLE HOUSE”, “Mi camarera favorita del WAFFLE HOUSE”... Echadle también un vistazo al menú, que os lo podeis descargar en PDF.

Bueno, una vez retomada la carretera nos vimos en medio de un atasco increíble y pensamos que no llegaríamos a tiempo para tomar el ferry para ir a la isla... ¡¡y era el último del día!! Llegamos en el último minuto y tras momentos de mucha confusión conseguimos apañar todo el equipaje dentro del barco. Eso sí, en el coche nos olvidamos los abrigos y el agua...

El trayecto en barco estuvo muy bien... vimos cormoranes y delfines. Mujy lindo. Y tras casi una hora de zigzaguear entre islas, llegamos a Cayo Costa. Allí nos recogieron los rangers del parque y nos llevaron en un remolque descubierto la mar de aparente al otro lado de la isla, donde está el camping y la playa. En el camino ya te quedabas tonto... había bosques de palmeras y live oaks (robles como los de “Lo que el viento se llevó”) con Spanish moss colgando de las ramas... también había zonas pantanosas, zona de manglares, zona de dunas, zona de sabana... todo eso en una isla tan chiquita.

En el camping nos encantó nuestro sitio... el más apartado de todos, por lo que casi casi nos hacíamos la idea de que estábamos solos en la isla (aparte de que podías mear en cualquier esquinita sin que nadie te llamara la aten ción). En el campamento la vegetación ha formado como grandes oquedades en las que se puede montar la tienda... como cuevas formadas por las ramas de los sea grape/trees... en algunos sitios las tiendas se habían levantado entre los árboles, y para llegar a la mesa y a la barbacoa tenías que caminar por un pasillo de troncos... muy bonito.

En la isla no hay electricidad, aunque sí que hay agua potable y duchas frías... así que lo que se puede hacer allí es pasear, hablar, pasear, hablar, comer, pasear, dormir, comer, pasear... ir a la playa, recoger conchas, leer, pasear... y eso es lo que hicimos durante tres días. Iba a decir que también durante tres noches, pero es que nos acostábamos prontito y dormíamos durante casi diez o doce horas... el primer día nos acostamos ¡¡¡a las 7!!!).

En la isla todo es bonito. La verdad es que es de quitarle el aliento a uno. Los senderos del interior, las playas, con todas esas conchas en la orilla y los troncos de palmeras arrastrados desde dios sabe donde... todo maravilloso. En cuanto a la fauna de la isla... vimos mapaches, cerdos salvajes, ardillas, mariposas preciosas... y ospreys (una especie de halcón grandote del sur de Florida... al lado de nuestroa tienda había un nido de ellos y hasta vimos a una pareja haciendo "sus cosas íntimas" a menos de diez metros), buitres negros (turkey vultures), y muchos más pajaros, entre ellos mi favorito de estas tierras, el cardenal. Tuve la suerte de ver una pareja junto a los lavabos del camping y el macho, que es rojo (la hembra es gris con los mofletes amarillos) estuvo a treinta centímetros de mí... ese fue mi regalo de Navidad. También hay alligators, que no vimos, y en el verano se pueden ver manatíes. El ranger nos contó que los delfines se lo pasan de miedo en el muelle, quitándole los peces a a los pescadores y saltando, poniéndose verticales sobre el agua... y son completamente salvajes, nada de domesticados.

Hemos decidido volver a la isla en cuanto sea posible, la verdad es que merece la pena repetir en un sitio tan, tan bonito. Os incluyo también el link a su página oficial... no dicen gran cosa, pero bueno, os haceis una idea.

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Aparte de esto, os puedo contar que ayer por la noche fuimos con una compañera de Glen a ver los adornos navideñolumínicos de los jardines de Miami Shores.... hay gente que creo que está mal de la cabeza. Espero que las fotos que saqué salgan bien, porque merecen la pena...

Aún no sé qué vamos a hacer en Nochevieja... lo mismo no hacemos nada... de todas maneras he de hablar con mi señorita, por si tienen un plan interesante, aunque me parece que como hoy hemos llevado el coche a arreglar (lo compramos baratito, 2000 dólares, pero con un abollón junto a la rueda delanteroderecha... cada vez que tomamos una curva a la izquierda hace un ruido terrible y la rueda ha destrozado la pieza esa de plástico de protección del motor) no vamos a poder hacer nada.

Por cierto, mañana a las seis de la tarde de aquí, medianoche en España, tomaremos las uvas en retransmisión telefónica en directo con mi familia... es una vieja costumbre que empezó mi hermano cuando empezó a viajar en Nochevieja... nos llamaba desde Gerona, desde Marruecos, desde Benicasim... y yo ahora lo haré desde Miami.

Bueno, a los que hayan llegado hasta aquí les deseo que tengan un muy feliz 2004.

Muchos besos a todos.

Acabamos de llegar de la isla... tres días incomunicados, caminando por senderos entre palmeras, dunas, bosques... playas inmensas con troncos traídos por la corriente desde sabe quién de qué otra isla... escribiré un post entero acerca de eso, pero lo de hoy es más cortito...

Como hemos llegado destrozados de tanto ejercicio, nos hemos puesto a ver la tele: Mr. Bean, Keeping up appearances... y SONRISAS Y LÁGRIMAS, y en medio de la ñoñísima Do Re Mi me he dado cuenta a quien me recuerda Julie Andrews en esta horrorosa y maravillosa película: ¡¡¡ESPERANZA AGUIRRE!!! Por favor, intentadlo, no es ningún gran esfuerzo, ¡¡¡os lo aseguro!!!

Voy a contarles a ustedes
lo que a mí me ha sucedido.
Fué la emoción más profunda
que en mi vida yo he sentido.

Fué en Nueva York
una nochebuena que yo preparé una cena
pa´ invitar a mis paisanos.
En la reunión, toda de españoles,
entre palmas, vino y oles,
por España se brindó.

Pues como allí no beben por la ley seca.
y sólo al que está enfermo despachan vino.
Yo pagué a precio de oro una receta
y compré en la farmacia vino español.
Vino español, vino español.

El vino de nuestra tierra
bebimos en tierra extraña.
Que bien que sabe ese vino
cuando se bebe lejos de España.
Por ella brindamos todos
y fue el fin de aquella cena.
La nochebuena más buena
que soñar pudo un español.

Más de pronto se escuchó
un gramófono sonar.
Callad todos, dije yo,
y un pasodoble se oyó
que nos hizo suspirar.
Oyendo esa música
allá en tierra extraña.
Ya nadie reía,
ya todos lloraban.
Oyendo esa música
allá en tierra extraña.
Eran nuestros suspiros,
suspiros de España.
(¡chun!)


Pues fijaos que, de repente (no mais que de repente) me ha entrado la vena folklórica...

Es 23 de diciembre y no vamos a celebrar nada parecido a la Navidad. Mi ActionMan y yo hemos decidido no hacernos ningún regalo y además nos vamos a una isla sin electricidad para que no suenen ni villancicos ni haya luces horribles a nuestro alrededor (lo de las decoraciones luminosas en las casas de Miami se merece un estudio psicológico y de los grandes) y, ¿qué me despierto cantando esta mañana? “En tierra extraña”... ¡¡¡ahí es ná!!! El himno kitsch-navideño del emigrante español... solo que ya no es lo mismo, porque ahora el vino se vende en cualquier supermercado (y no me he fijado si lo venden aún en las farmacias, a no ser que éstas tengan tienda de licores aparte... no sé, en cuanto publique esto voy a darme una vuelta por el Walgreens de la esquina a ver), lo que le quita todo sentido de ilegalidad y gamberrismo porque... ¿quién no se ha imaginado a la Piquer yendo de incógnito a la farmacia, toda velos y gafas oscuras, a presentar la receta de Don Simón al señor farmacéutico y, tras esconder la botella en el rebozo de su mantón de Manila, cruzar las calles nevadas de Nueva York con los ojos echando chispas de alegría, como si fuera una morfinómana como las de Rusiñol que ha conseguido su dosis?).

En fin, que descanseis lo que teneis vacaciones, que intenteis comediros en eso de las cenas y comidas a base de restos de cenas, que luego las lorzas se nos pegan para todo el año, y que lo paseis bien o, por lo menos, que no lo paseis mal... porque de una manera o de otra, todos tenemos a quien echar de menos... mi hermana sé que se pasará la cena llorando porque su hijo estará pasando la noche con su padre, mi madre se acordará de sus padres y de sus hermanas, yo me acordaré de todos ellos... Si me entra algún momento triste, intentaré acordarme de las navidades de cuando era un crío... (es que para mí la regresión es lo que mejor me funciona, he de confesar).

El domingo intentaré escribir sobre estos días de camping salvaje...

(Por cierto, se me ha roto la cámara, así que de fotos nada.)

Bueno, este es un post bastante íntimo, así que si alguien cree que puede herir su sensibilidad y prefiere no leerlo, está avisado, y le remito a cualquiera de los enlaces de la derecha...

Sí, yo creo que lo de esta mañana ha sido una venganza... se ha vengado de mí. Por “lo de antes”.

En fin, pues resulta que ¡me ha echado de la cama! Sí, sí, como lo oís... me ha dicho “oye, ¿y por qué no te levantas? Yo quiero dormir”, y eso que yo estaba tan a gustito en mi cama, dentro de nuestro saco de dormir* y la funda de forro polar, aunque menos, pensando en mis cosas y... nada, que me ha echado.

Yo creo que es una venganza por lo de esta y casi todas las mañanas... a ver, os lo explico. Muchas parejas tienen ciertos problemas de incompatibilidades... sin ir más lejos, hace tres años justos, una pareja de amigos míos rompió porque los dos querían “estar arriba”... y, bueno, uno cedía, pero resultó que se tuvo que ir a trabajar fuera y allí descubrió las mieles de “estar encima” todo el rato y, claro, la pareja se rompió... la nuestra no es ese tipo de incompatibilidad... la nuestra es que, si lo hacemos en la cama, yo prefiero hacerlo de noche (y luego dormir como un bendito a su lado) mientras que mi ActionMan lo quiere hacer exclusivamente al alba, como los canarios... y claro, yo a eso de las 5 de la mañana empiezo a notar “avances” desde su parte de la cama, pero es que yo a esa hora no puedo ni abrir los ojos... de verdad, que hasta duele, que no puedo... aparte, que no tengo fuerza pa’ná y claro, vete a pedirle peras al olmo.... ¿cómo voy a hacer eso si no puedo ni despegar los párpados ni levantar la cabeza ni ná de ná...? ¡Si es que a esas horas yo no soy persona!

Pues eso es lo que ha pasado esta mañana... que yo no reaccionaba y claro, se ha tenido que levantar y se ha puesto a escribir... luego, dos horas más tarde, cuando ah visto que yo daba señales de vida (creo que lo ha visto por el bulto e el saco de dormir) se ha vuelto a la cama y hemos [piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii], y una vez corridos, duchados y sequitos, y cuando nos disponíamos a estar un ratito tranquilitos en la cama... (es que ninguno fuma), ¡va y me echa!

Pero esto no se va a quedar así, no señor, no se va a quedar así... ¡se va a enterar éste lo que vale un foncarralero! ¡¡¡SE VA A ENTERAR!!!



*explico... es que la casa la estamos montando, como quien dice, y claro, aún falta mucho por hacer... por eso, en lugar de edredón, lo que tenemos es nuestro saco de dormir doble. Lo compramos para ir de acampada... imaginaos, es un saco de 190x135, muy cómodo, que se engancha a un colchón hinchable... un lujo para ir de acampada. Y como estos días hace en Miami un frío que ni los lagartos, pues es lo que usamos para dormir en nuestra cama full-size, que según los estándares americanos, es insuficiente ara que duerman dos personas... ¡sabrán ellos!

¿Quién dice que en Miami no hace frío? Esta mañana he venido a casa de mis señoritas talmente como si siguiera en Fuencarral. Allí estaba yo, andando hacia el autobús, con camiseta, camisa , jersey de lana y chaquetón, y me cruzo con un niño que iba corriendo a la parada del bus escolar (uno de esos amarillos como los de las películas) en camiseta de hombreras y la camisita en la mano... yo he pensado que seguramente yo llevaba de más, pero el chico este llevaba bastante de menos... En fin... hoy ni donuts ni nada, he venido directamente a la casa a darle a mi señorita un par de instrucciones sobre las sábanas y demás, y ya nos hemos puesto a charlar y me temo que ha salido de casaa la hora en que debía llegr al trabajo... y con lo lejísimos que trabaja esta mujer!...

En fin, que estoy muy a gusto con mi señorita. Eso sí, sigo sin saber qué hacer en el estudio y en los armarios... pero poco a poco conseguiremos encarrilar la casa.

Y sigo limpiando, que tengo ganas de salir pronto y volver a hacer lo del otro día de volver andando a casa... no sé, la verdad, lo que se tarda, porque el otro día entré en todas las tiendas de antiguedades y de caridad (entre ellas las del ejército de salvación) a ver si encontraba algo de interés... me compré un juego de botes de cocina, de aluminio y plástico negro, muy de los 60, por... 4 dólares? Un precio ridículo. Hoy no pienso comprar nada, pero quiero sacar fotos en el cementerio que hay cerca de casa... es que hay una tumba con dos leones y un elefante, a tamaño real y colorido plasticosa extra brillo que, por supuesto, no quiero perderme...

A veces pienso que por mi manía de andar a todas partes voy a acabar conociendo Miami mucho mejor que la gente de aquí... todo el día en la US 1 o en la I 95... qué horror!

Sigo con mucha ilusión por mi viaje a Nicaragua...

He decidido que hoy sólo gafas... bueno, la verdad es que se trata de un híbrido entre post normal y gafas, pero he decidido ponerlo allí.

Por cierto:
Hoy hemos recibido una invitación del colegio donde mi ActionMan/mi Gran Cazador blanco/mi Ídolo Africano da clases, para la gran fiesta navideña de profesores y empleados. La fiesta será en el salón vaquero del Country Club de Miami Shores... y todos debemos ir vestidos de cowboys y cowgirls (creo que no admiten travestismo). Esto puede ser antológico.

Decidido, en mi viaje de enero me voy a Granada, Nicaragua. Espero no encontrarme un paraíso de turismo barato yanqui... pero en fin, se supone que es la ciudad colonial más colonial de toda Centro América... imagino que sacaré fotos. Mi ActionMan está muerto de envidia.

Planes de Navidad: como tanto mi ActionMan/Miniñomiamantemihombre/mi Ídolo Africano como yo tenemos las familias en otros países, hemos decidido olvidarnos de las navidades y nos vamos del 24 al 27 de camping a Cayo Costa, una isla al oeste de la península de Florida que no tiene electricidad ni nada... sólo estaremos nosotros, los animalitos, el frío/los mosquitos (hay que escoger, uno u otro)... bueno, y unas cuantas docenas de campistas más. Parece prometedor.

(domingo, 4 pm)

Ahora mismo está lloviendo en Miami... es más, está diluviando. Por la ventana abierta del cuarto vacío ha entrado tanta agua que no puedes acercarte a menos de un metro de la ventana... y tenemos una tormenta encima, con truenos y demás. Cada vez que hay un trueno, los cubiertos de servir que hay colgados de la pared, junto a la cocina, tintinean como una campanilla de las de llamar al servicio... da un poco de miedo. Dicen que en Miami hay más posibilidades de que te caiga un rayo que de que te toque la lotería...

Hace un rato le comentaba a mi ActionMan que en este preciso momento me gustaría estar en el Financial District, viendo la lluvia entre edificios... porque aquí, en nuestra casa del ghetto de Little River, no es lo mismo. No, definitivamente no es lo mismo. El barrio es demasiado plano –como (casi) toda Florida- y las casas sólo tienen una planta, y los árboles no son demasiado altos... en definitiva, la lluvia aquí te da la sensación de que el cielo se te cae encima... no es lo mismo ver la lluvia cayendo en esta planicie que puede serlo en Madrid, porque allí al menos no todo lo que ves por encima de tus hombros es cielo... están los edificios y los diferentes grados de visibilidad de estos dependiendo de la fuerza de la lluvia, las farolas –otra cosa, aquí casi no hay farolas- y el poder ver éstas a través de la lluvia... el reflejo de los edificios en el suelo mojado...

Me he mudado de la cocina al cuarto vacío... con mesa y todo, y miro, a través de la ventana, al aguacate (¿cómo se llama el árbol del aguacate?) que hay plantado en el jardín, un árbol soberbio, y lo veo en distintos tonos de gris y rayado por la lluvia como un dibujo a lápiz o como uno de esos absurdos filtros artísticos del photoshop.

Es como si la lluvia, como algo que simplemente cae del cielo, no fuera tan impresionante... y\he de confesar que me a veces la he sentido como un fastidio. Creo que lo que verdaderamente me gusta de la lluvia son los efectos que produce: los olores, la luz, el ruido... la emoción de las tormentas (en Benicasim, en las tremendas tormentas de verano, me salía a la terraza envuelto en una colcha y me pasaba ahí todo el tiempo que durase, acurrucado en el sofá-columpio, al resguardo de la lluvia, pero recibiendo en la cara, de vez en cuando, alguna gota rebotada de la barandilla, y escuchando la lluvia y, 1-1, 2-2, 3-3, 4-4... qué cerca de caído éste, el sonido de los truenos tras cada relámpago).

Sí, reconozco que tengo una imagen muy romántica de la lluvia (y bastante urbana también), que creo que se relaciona con la mitificación que siempre he hecho de EL NORTE... Por alguna extraña razón, desde niño, me he sentido atraído por él. Curioso, porque hasta que no tuve 16 años, en el 84, no viajé hasta Burgos, y no pasé de allí hasta el 89, cuando fui por primera vez al pueblo de mi abuelo, en lo que viene a ser el límite entre Castilla, Cantabria y el País Vasco; y en el 95 fui a Asturias por primera vez en mi vida, y un año más tarde al Valle de la Reina, al norte de León, y a San Sebastián... y en el 99 al Valle de Mena, uno de los lugares más bonitos del mundo... Lo bueno es que el mito no se vino abajo con estas visitas. Es más, cuanto más veces lo visito, más me gusta: el verdor, la bruma, las montañas... Visitarlo y que se ponga a llover no es una molestia, porque lo ves en su elemento y que, al fin y al cabo, es la lluvia la que le hace ser como es.

Para el próximo viaje a España me he prometido ir a conocer Galicia y Euskadi.

A ver, necesito que me digais cómo se cubre la captura de Saddam en la tele (no TVE1) española y en otros medios... porque lo que está pasando en este país es absolutamente insoportable!!!

Entre otras cosas, el señor Bush va diciendo que ya el pueblo irakí está liberado o se oye a militares diciendo que ha sido un gran esfuerzo capturar a saddam, pero aún va a ser mayor el de reconstruir Irak... ¡majaderos! Y hasta entrevistan a las esposas de los militares... todo el día lo mismo.

Aunque hacía meses que no me acordaba de esta peli, está visto que se me ha quedado grabada muy dentro...

Mañana viene una chica a ver el cuarto que tenemos para alquilar... como es una chica, hemos decidio que la casa debe estar bien limpia, sobre todo el baño, por lo de las gotitas alrededor de la taza, y la cocina... así que me he pasado la tarde limpiando y fregando... cuando de repente decide mi Santo Varón, mi Ídolo Africano, que es hora de hacer la cena, y en diez segundos, no más, ya está el suelo hecho una porquería... y áhí es donde salto yo... "¡me cago en los clavos la sepultura el Señor!¡Mi suelo!... Que me paso las veinticuatro del día limpiando y no me luce!" Y de repente me he quedado de piedra pensando en cómo diablos se me han juntado varias escenas del "¿Qué he hecho yo para merecer esto?" sólo por ver un poco de porquería en el suelo...

Que raro, desde que compramos la oferta de dos envases de a dos kilos de helado cada uno (Double Chocolate Chunk -chocolate con tropezones- y Key Lime Pie -pastel de lima-) no hago más que fregar cucharas de las grandes...

Muchas gracias por los comentarios del post anterior...

Después de tres días del demonio mañana empiezo de nuevo a tomarme en serio estas tareas de la búsqueda de empleo, a ver qué tal resultado me da... Estaré todo el santo día pegado al teléfono y no tendré mucho tiempo de blogear... a lo mejor cuelgo unas gafas que tengo por ahí, ya graduadas...

Un beso muy grande a todos, pero especialmente Bemorth, Cordelia, Dante, Emilio, Evam y Flor... por riguroso orden alfabético.

He cambiado mis enlaces a otros blogs... no me puedo pasar la vida leyéndolo todo.
Siento si alguien se siente mal por haberlo quitado de la lista... pero si eso le molesta a alguien, creo que ese alguien no debería estar escribiendo un blog.

No me apetece mucho escribir blog, así que copio y pego parte de una carta que he escrito hoy a una amiga...

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¿Cómo estas? Me tienes que poner al día en tus cosas, ¡eh! Si lees de
vez en cuando mi blog ya sabrás cómo estoy últimamente... un día en lo
más alto y al siguiente en lo más bajo... puñetera inestabilidad. La
verdad es que la situación esta no es la más ideal, no. Sé que aparte
de mandar los ciento y un curriculum debería estar llamando a las
empresas y demás, pero es que, de verdad, no me sale... es hacer algo
en lo que no tengo ninguna fe y además lo he de hacer en inglés y
enfrentándome a una mentalidad tortalmente distinta... aquí te tienes
que vender como si fueras un coche de segunda mano, y yo para eso de
las ventas siempre he sido un desastre...

Miami sigue siendo un asquito, pero por lo menos me animo a salir de
vez en cuando y a veces lo disfruto y otras no... lo que pasa es que no
siempre se siente uno como para salir... o hay que esperar a un autobús
durante horas (y una vez dentro tardas lo menos 50 minutos en llegar al
centro) o caminar media hora hasta llegar a la parada que te
interesa... la semana pasada tuve una entrevista (nada, buscaban un
becario) y tardé dos horas en llegar allí, y eso que tuve una suerte
loca con los autobuses... Me he puesto a andar a lo loco... de momento
he llegado hasta el puente que va a Miami Beach (y una vez allí camino
durante horas), más allá no me atrevía a andar, pero un día en el que
no haya prisas ni nada imagino que lo acabaré haciendo.

La verdad, que no hay mucho más que contar... es que si sigo empiezo
con lo mal que me siento aquí... Es extraño pero parece ser que la he
tomado contra ----, el pobre. Puedo pasarme el día encasa con más o
menos angustia o estando más o menos bien, pero en cuando llega él me
viene la depre... y no digamos si me dice de ir a hacer la compra o ir
a algún sitio a dar una vuelta. En cuanto me monto en el coche me entra
una sensación horrible de inutilidad... algo así como "fíjate, que me
tiene que sacar de casa" o "mira tu el inútil, que le tienen que llevar
en coche a todas partes"... la sensación de dependencia es terrible,
pero de momento, salvo pasarme el día en autobuses, parece que no tengo
otra alternativa. Añádele la sensación de inutilidad por no hacer lo de
las llamadas o por no recibir ni una sola respuesta por lo del CV...
pues una situación envidiable, ¿no?

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Lo dicho

MADRID

1) ¿En que tipo de vivienda vives: casa, piso, chalet, de propiedad, de alquiler, en casa de tus padres, en residencia de estudiantes...?
Piso, de alquiler barato (se trata de la antigua consulta de mi padre).

2) ¿Cuál es tu estancia favorita de la casa?
El dormitorio... tiene muchos colores y mucha luz, e un armario de antes de los años 20 precioso... pero en el salón tengo todas mis sillas y mis cristales, y unas lámparas preciosas..

3) ¿Cuál es el último objeto que has comprado para la casa (o para tu habitación)?
Fue un jarrón de Nils Landsberg de Kosta de los 60 y otro de Per lutken de Holmegaard... y un juego de quesera, mantequillera y bandejas alemanas de los años 50 de WMF, diseñadas por Wilhem Wagenfeld.

4) Si pudieras elegir, ¿qué obra de arte te gustaría tener en el salón?
Un sillón Womb de Saarinen y una La Chaise de los Eames

5) Nunca sales de casa sin...
las llaves... ya lo hice varias veces y no merece la pena


MIAMI

1) ¿En que tipo de vivienda vives: casa, piso, chalet, de propiedad, de alquiler, en casa de tus padres, en residencia de estudiantes...?
Una casa de alquiler... con su backyard, su driveway, su buzón típico americano...

2) ¿Cuál es tu estancia favorita de la casa?
En el salón hay un rinconcito muy majo, pero la verdad es que no me acaba de llenar...

3) ¿Cuál es el último objeto que has comprado para la casa (o para tu habitación)?
una mesilla de noche

4) Si pudieras elegir, ¿qué obra de arte te gustaría tener en el salón?
Cualquiera de las que tengo en Madrid

5) Nunca sales de casa sin...
echar pestes

¿Queda claro? no quiero comentarios en este post, ni correos ni nada, porque lo que voy a escribir no es más que un escape, por algún sitio tengo que explotar y tiene que ser por aquí.

Además, lo más posible es que mañana todo será distinto... pero de verdad que estoy por mandarlo todo a la mierda y volverme a España.

Últimamente no sé si mi vida se parece a una noria, un tiovivo o una de esas atracciones de caída al vacío...

En cierta manera podría decir que esta etapa me está rejuveneciendo... he vuelto a mis 20 años, cuando lo mismo estaba radiante de felicidad como deprimido hasta la médula... ¡rey de la bipolaridad de nuevo! Ya veis, tras años de duro esfuerzo para conseguir el tan ansiado equilibrio, lo he jodido todo ”por amor”... (¿y quién me iba a decir a mí que saliendo esa noche iba a cambiar mi vida de manera tan radical?)

Por otro lado, estoy condenado a no leer noticias de mi país, a no leer los post de aquellos que beben té, o de los que pasean entre las hojas secas, a no volver a mirar en internet una de esas tiendas virtuales (de las que tengo a la derecha) en las que se amontonan bytes con forma de cristales de Per Lutken o sillas de Aarnio, porque entonces sí que me monto en la atracción de caída libre, eso sí, sin impacto final. Por lo menos...

Y bienvenido al tiovivo que no para, a la ruleta de la fortuna... Estoy montado en un caballito pintado de negro y de verde (menos), con algunos destellos plateados, y no sé si cuando el tiovivo pare lo que tenga enfrente será el puesto de algodón de azúcar o la salida del parque...

Con lo poco que me han gustado a mí nunca los parques de atracciones.




(¿Pero se podrá ser más gilipollas?¿Cuando se ha visto que nadie se ponga a llorar oyendo "El huevo con papas" de Martirio mientras palmea por sevillanas?. Eso es mi vida, una buena juerga flamenca.)

Hoy es miércoles y me he levantado prontito, y después de desayunarme fuertecito me he puesto la cofia y la bata y me he ido a por el autobús, que no he perdido por los pelos, y aquí estoy de nuevo, en casa de mis señoritas, haciendo que limpio... (esto lo escribo porque sé que mi señorita me lee, y así le hago de rabiar un poquito, pero es mentira... he hecho la cocina, he ordenado algunos armarios, que aquí les llaman capboods, he levantado las alfombras y limpiado debajo -me ha dado mucho gusto ver que mis señoritas no son de esas que meten la mierda debajo de las alfombras-, he movido el sofá, la mesa y el mueblecito de la entrada también y he pasado la vacuum por toda la casa, he limpiado a mi buda, que esta tan solo el pobre, y a la señora tan sofisticada del cuadro la he limpiado el cristal. Sólo me queda el baño e intentar poner orden en los últimos cuartos de siempre: la oficina y el dormitorio...)

Por cierto, que mis señoritas se han comprado unas sábanas de color rojo putón la mar de aparentes, y es lo que digo yo, que con una cama de ese tamaño y las sábanas rojas, a una se le suben los colores... es una cama que incita a hacer locuras.

Hoy toca "operación percha". Mi señorita me ha dicho que percha de alambre que vea, a la basura. Y en ello me ando... parece mentira, la de ellas que hay por toda la casa... porque no es por criticar, señorita, pero me he encontrado dos en el salón, y una de ellas debajo del sofá...

Y bueno, ya he descansado bastante. Ahora mismo me acabo la pepsi y me pongo con el baño, aunque es una pena porque estoy aquí con mis niños y en cuanto me levante se levantan ellos... la Elenita está debajo del sofá, y el Luisito dormido en el suelo, con la cabeza apoyada en unas tenis que tienen pinta de ser incomodísimas como almohada... Elisita, la pequeña, debe estar por los cimientos, que le gustan mucho a ella. Es una perra rara...así entre nosotros, yo creo que es una perra lesbiana.

Bueno, ya está bien, me pongo a trabajar que si no no acabo nunca y hoy quiero ver una iglesia de por aquí cerca que me va a traer muy buenos recuerdos... mañana hablaré de ella, si es que me da tiempo a verla...

Por cierto, que le quiero recordar a mi señorita que como hoy no me ha pagado (no ha debido de tener tiempo de agarrar el carro y sacar dolores del draif-zru bank ese...), la semana que viene va a tener que pagarme 90 dolores. No es que sea mucho, pero bueno, a una le hace un apaño.

Pues sí, me he levantado con ganas de escribir, con ganas de leer los blogs de otras personas, pero blogspot me dice que nanai, que no se pueden ver... pero bueno, al menos blogger me funciona y he decidido que una buena taza de caldo no me sentar'a mal... as'i que aqu'i estoy, sin nada especial que contar pero con ganas de soltar demonios, sapos y culebras por esta boquita que "vaya usted a saber quién" me ha dado.

Ayer tuve una entrevista de trabajo terrible... no por la entrevista en sí, pero es que la señora entrevistadora no sé si era pesimista por naturaleza o realista total, pero no me puso el panorama muy prometedor... aparte de eso tardé dos horas en llegar al sitio de la entrevista, al sur del aeropuerto... el mismo edificio en que Iberia tiene sus oficinas en Miami, por cierto. ¡Dos horas! y eso que tuve una suerte tremenda con los autobuses... podría haber tardado tres de haber perdido el segundo, cosa que estuve a punto de hacer porque para hacer el transbordo tenía que andar dos bloques, pero no sabía en que dirección... un amable señor cubano me indicó y de repente me ví en medio de la zona más cutre de Overtown, con drug dealers a mi alrededor, mirándome como si no se lo creyeran... allí estaba yo con mi pantaloncito claro de vestir muy elegante (de Cortefiel), mi camisa azul oscura (de Zara... bueno, de hace 6 años lo menos, pero de muy buena calidad), mis zapatitos de cuero negro preciosísimos... y mi cámara en la mochila... menos mal que mi autobús vino pronto.

Después de la entrevista... me puse a andar por la zona, llegué a Coral Gables y crucé calles (Sorolla, Madrid, Segovia, Salamanca) hasta llegar a Little Havana... y los pies doliéndome como no os podeis imaginar, porque serán unos zapatos finísimos, pero para andar nada como las botas de trekking. Al final llegué a casa destrozado de dolor, cansado, deprimido, harto... creo que me pasé el resto del día en la cama.

Y hoy... pues a saber. Me he levantado de mejor humor pero con dolor de garganta, lo que me faltaba, como si fuera barato y/o cómodo ir al médico en esta mierda país.

1)¿En que ciudad o pueblo vives? Especifica país, que a veces las ciudades se repiten.
Madrid, ¡¡¡Ehpaña!!!

2) ¿Un buen restaurante?¿Uno barato?¿Uno especial por algún motivo?
El último descubrimiento fue Gesar, un tibetano que hay en Huertas... creo que en los últimos seis meses fui como... 5 ó 6 veces. Me gusta mucho el Al-Haima, en la calle Barbieri, aunque me parece que los mismos dueños abrieron el Arabia y se llevaron allí al cocinero, porque no ha sido lo mismo desde entonces.
¡Ah! Y el Restaurante Vegetariano de Marqués de Santa Ana, en Malasaña... allí fuimos a cenar la NiñaJara, Endrina, mi ActionMan y yo el día de nuestra unión de hecho (sólo nos unimos mi AM y yo... ellas fueron las testigas -ya sabeis, esas que no pueden mentir-)

3) ¿Qué es lo que más te gusta de tu población, y lo que menos?
Lo que menos es que cada vez hay más barullo y está dejando de ser un sitio agradable para convertirse en un lugar lleno de gente, mención aparte el precio de la vivienda, que se ha puesto imposible.
Lo que más... andar por as calles solitarias, que las hay, y a prácticamente cualquier hora del día y la noche sintiémdome absolutamente seguro y libre.

4) ¿Algún sitio, monumento o rincón de tu ciudad que sea un pecado no visitar?
¿La estatua del Quijote? juassss... Las callecitas de detrás del ayuntamiento... las callecitas en general. Ah, y las puertas de bronce de la Catedral de la Almudena... una de las muestras de cómo se puede gastar una cantidad ingente de dinero en mierda de la más ínfima calidad (sobre todo para echarse unas risas, por supuesto).

5) ¿Sabes alguna leyenda, mito o curiosidad de tu zona?
Uyyyy, hay libros y libros sobre el tema. las secciones de "Libros de Madrid" en las bibliotecas son extensisimas... me gustan las historias de fantasmas (como las de la Casa de las siete chimeneas) o las de crímenes, como las del barbero y el panadero que estaban compinchados, y cuando el barbero tenía en sus manos a un pobrecito viajante sin familia ni nadie que le echase de menos, le rebanaba el pescuezo y le mandaba el cuerpo al panadero para que hiciera pepitos de carne que se agotaban en un santiamén de lo riquísimos que estaban...


Y bueno, se que es mucho abusar, pero no os perdais el otro post de hoy, el de los patriotismos...

Mi Santo Varón, mi Ídolo Africano, se acaba de marchar al trabajo y yo me he levantado, he puesto el CD de El pájaro de fuego de Stravinski y he ido a la cocina a por un vaso de zumo de naranja... he notado un poco de hambre y he ido a por los carbohidratos que tenía más a mano: los Corn Flakes, y me he quedado de piedra: en lugar del típico gallo de colorines está la estatua de la libertad, con una bandera USA detrás, y encima del todo la marca y el texto: “Kellogg’s celebrates AMERICA. Limited editon.”. No doy crédito… miro el lateral… “Busca las cajas coleccionables de Corn Flakes”... “Muestra tu Espíritu AMERICANO: mándanos un código de barras más 2 dólares y te mandamos estas pegatinas de la bandera americana” (ya las podrían dar gratis dentro de la cajita, digo yo, que no debe ser tan caro)... No lo suficientemente atónito le doy la vuelta al paquete... El acabóse: “Iconos de America. Cada uno de estos símbolos es único, pero están unidos en lo que representan: las verdades evidentes que celebramos en America” y aparecen la estatua de la libertad, la campana de la libertad de Philadelphia, el águila calva y ese monumento al kitsch titánico que es la escultura del Monte Rushmore, en Dakota del Sur, con la cara de cuatro de los presidentes: Washington, Lincoln, Jefferson y Roosevelt. Cada uno de estos símbolos americanos viene acompañado de un texto que ensalza los valores americanos, la libertad, la independencia, etc, etc... ¡¡¡y no doy creditito!!!

Y lo más triste es que están poniendo todo esto para que los niños lo lean y sea lo primero que les entre en la cabeza cundo aún no han acabado de despertarse.

A lo mejor el amigo Annsaar debería tomar nota y poner consignas españolistas en los botes de Cola-cao y en los Bolly-caos de toda España para que los niños intenten convencer a sus papás en las próximas elecciones...

Y ahora voy a olvidarme de esto, voy a escuchar tranquilamente el último cuadro de El Pájaro de Fuego (se llama “Regocijo General”) y me voy a vestir para mi primera entrevista de trabajo... los hijoputas no ofrecen mas que un puesto de becario... me pregunto si eso, aparte de hacerme trabajar gratis, me obligará a chupársela a mi jefe o jefa (yiiieeeck). La verdad es que ahora mismo tengo una especie de sentimiento dentro tipo...a ver, les pongo verdes en su propia casa, me molesto siquiera en gastarme al menos 500 pesetas en ir a la puta entrevista para nada o voy y les digo que sí a todo... puta emigración.

Aparte, la sensación de incomodidad que siento cada vez que “me visto”: zapatitos, pantalón claro de pinzas, camisita planchada de manga larga... señor, ¡¡¡qué asco!!!

Definitivamente, no estoy yo en mi mejor día para una entrevista, aparte de que tengo el cutis fatal... no voy a poder hacerlo.