El cajon de los juguetes

He empezado una lectura paralela de Mrs. Dalloway de Virginia Woolf y Las horas de Michael Cunningham.

Me encantó la película de Las horas y me leí el libro, que por supuesto es mejor, y hace años ví la peli de Mrs. Dalloway (¡con ese pedazo de Vanessa Redgrave!). En Dublín intenté leérmelo en inglés, pero todo lo que tiene de bonito, lo tiene de difícil, y mucho más para mí que aunque me defiendo en inglés me falta todo el vocabulario del mundo.

Así que estoy yendo de unas páginas a otras intentando comprender a Clarissa Dalloway a través de lo que le sucede a Clarissa Vaughan, y al revés.

A veces me creo que yo soy un poco Mrs. Dalloway. Solo que últimamente un poco pendón, eso sí.

Hace diez días que no me paso por aqui y éste es el primer post que no me traigo preparado de casa, dedicándole tiempo y cuidado (no es que los últimos hayan sido muy buenos, siempre hablando de sexo...), si no que lo estoy improvisando en este cutreciber del Barrio del Pilar.

Me he dado cuenta de que hacejusto una semana cumplió Geyper un añito... imagino que esos momentos estaba yo tan pendiente de los otros geyperman de carne y hueso (y pelo, que este es un punto importante!) que ni me acordé de este Geyper virtual al que he cuidado, como un tamagochi, desde hace ya un año. Después de este tiempo, me ha encantado ver mensajes de mi grupo de "fieles" incondicionales. Muchas gracias y miles de besos a Carmen, Pau y Jose.

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Tengo a Gi-Joe un poco depre... la culpa es, indirectamente mía, porque el viernes pasado me lié con el mejor amigo del tipo que le ha llevado a una depresión terrible durante más (bastante más) de un año, aunque es demasiado complicado e íntimo para airearlo yo por aqui; y él, que no me cuenta casi nada de ésto, tuvo que soportar lo que yo le contaba el sábado por la mañana, ignorante de que hablándole de la noche anterior y de J., Gi-Joe lo estaba pasando mal, muy mal. Exactamente igual que cuando yo le contaba acerca de cuando conocí a mi ex-ActionMan, porque al tipo ese le conoció seis meses antes en "idénticas circunstancias".

A Gi-Joe este silencio le está costando mucho sufrimiento y, a veces, mi falta de silencio también.

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Y bueno, ya que hablo de lo del viernes... por primera vez en dos meses me he despertado al lado de alguien a quien me ha encantado encontrar ahí. Será porque es un osazo tierno? por el pecho y la tripa peludos? (en un momento me creí protagonizando "Gorilas en la niebla"...) vayan ustedes a saber, pero me podría haber enamorado (y lo mejor es que no hay razones, de momento, para que eso no pase...)

Este fin de semana no salgo, o salgo poco... en algún momento se me tendrá que acabar lo de ir a tres bares cuatro días a la semana (más que nada porque no tengo yo la economía para semejantes alegrías), así que he decidido empezar a entrenarme.

GiJoe me ha dejado la cámara digital y me he abierto ficha en uno de esos sitios de "tío busca tío"... ¡¡¡pero paso de deciros en dónde y cuál es mi nombre!!! No quiere uno que vayan todos en tropel a ver al Geyper despelotado (aviso... el nombre no tiene nada que ver con "geyper"), porque en el fondo, aunque esté hecho un pendón, el Geyper todavía es muy tímido (cualquiera lo diría... que yo creo que más que tímido es raro de narices).

Por cierto, que me acabo de dar cuenta de que el Geyper no está tan mal como creía...

Pues sí, se me acumulan los posts que voy escribiendo en el ordenador de casa... llegué el jueves de Benicásim y como el ciber de al lado de casa está de vacaciones no he tenido oportunidad de publicarlos hasta hoy, que me he venido al Barrio del Pilar y me he metido por todas las plazuelas y callejuelas buscando un ciber. Además, este es más barato... buena cosa.

Besos a todos los que me siguen leyendo (y a los que me dejan comentarios, muchos más -que para algo vale hacer méritos-)

Por lo general hay pocas cosas que me sorprendan, y casi ninguna que me escandalice, pero aún quedan por el mundo personas y actitudes que me dejan con la boca abierta (bueno, hay otro tipo de personas, casualmente siempre son hombres, que también me dejan con la boca abierta, pero no voy a comentar más porque el que empezaría a provocar escándalos sería yo).

Este sábado decidí salir a completar mi guardarropa con algunas prendas y accesorios más acordes a mi nueva condición osuna y semi-fetish (con una suerte terrible, porque sitio al que iba, sitio que estaba cerrado... -al final lo terminé encontrando en El Corte In... ¡qué coño!) Total, que ya volvía yo a casa en un vagón de metro vacío -pensando en que aún había tiempo de pillar la frutería abierta- cuando se sube, y se me sienta justo enfrente, este ejemplar impresionante... más de 1'90, guapo, morenazo, con unas piernas de esas que te dan ganas de... Yo, desde luego, no pude evitar mirarle un poquito descaradamente (como soy tan tímido, cuando miro a un hombretón lo hago con bastante descaro)... y él miraba, y hasta sonreía, pero era algo raro: como si se sorprendía de que alguien le mirase de esa manera o como si fuera tímido, tímido hasta decir basta, pero no se le notaba violento ni nada...; En fin, que el juego duró un rato, y al llegar a mi parada me levanto y me voy a la puerta, dándole la espalda y en cuanto miro para atrás pa´echarle un último vistazo, le veo... ¡persignándose!

Así que eso era...yo el demonio y él San Antonio, o al menos un opus boy que me tenía como poco menos que la tentación mandada desde lo divino para probar su fe.
Tranquilo, cielo, prueba superada. Aunque lo de machacártela luego en casa no termina de encajar con la victoria. Tendrás que confesarte.

Bendito sea el COI por haber incluído el salto sincronizado (el masculino, por supuesto) en los juegos olímpicos. ¡Así da gusto ponerse a ver la tele!

Bendito sea GiJoe por ser mi amigo y estar siempre ahí -o no saber decir que no-.

Como dicen en La Mancha, "pa ser puta y no ganar ná, mejor ser mujer honrá".
Tras la segunda faringitis gonocócica (99% de posibilidades...) en un mes, he decidido redimirme un poquito (sólo un poquito) porque si no no voy a ganar para antibióticos... a partir de ahora diré eso de "no la chupo, nio la chupo, que tengo la boquita pequeña".

Ayer por la noche eché la primera piedra "conocida" (que a lo mejor ha habido otras que se han ido sumidero abajo... anoche meé en el frasquito (tuve una tarde horrible de dolor) y allí estaba la condenada, tamaño de grano de arroz -¡basmati!- y llena de picos y rugosidades).



Anoche también era la clausura del FIB: rave hasta las seis de la mañana justo delante de nuestros apartamentos. Y uno, que no podía dormir por el chunda-chunda (y estaba de lo más relajado tras el "parto") se acordó de aquello de que si no puedes luchar contra ellos, únete a ellos. Cayeron dos jovencitos "alternativos" de lo más aparentes. Es gracioso que nunca antes lo había hecho en la playa... y mucho menos delante de miles de personas.

Estoy hecho un zorrón. dentro de poco me tendreis que llamar Samantha Jones o similar...

Escribo desde Benicasim. No, no me he venido al FIB. No, no me gusta la playa... de hecho mi familia lleva 29 años veraneando aquí y lo detesto... la razón por la que esté aquí es que el domingo pasado tuve que ir a urgencias porque me empezó a doler el riñón cosa mala y llamé a mi hermano para que me llevara. Según los médicos es era un cólico nefrítico, pero parece ser que al final no lo es. Bueno, el caso es que como mi hermano se venía para aquí esa misma noche, donde ya estaba el resto de la familia, pues decidimos que yo tenía que venir y así mis padres me cuidarían...

A ver, recapitulando, parece ser que desde que he venido aquí, he tenido:
- un esguince
- unas anginas king-size
- una crisis renal

No está mal, ¿verdad?

La depre está mucho mejor, a pesar de que las pastillas las he dejado; cabe la posibilidad de que lo del riñón sea un efecto secundario.



Esta mañana he ido a la playa nudista de aquí. He tenido mi primer "trío entre los arbustos". La verdad es que uno se sorprende del tamaño de ciertas bocas... ¡y no digo más!